domingo, agosto 26, 2018

Sin destino

fui educado en escuelas públicas,
y a tiempo aprendí,
a no dar nunca las gracias 
por este
ni por otros porcentajes;
tengo suficiente instrucción
dicen los censos,
y aun no sufro como todos,
la parálisis que impide
negarse a deslizar la fe en la urna;
después entendí
que era una vida útil para otros
pero inútil para mí,
así fue que al tiempo
trepé en la organización,
metí la nariz en todo;
al final de mis días
no me fue tan mal
y poco recuerdo
de mi casi útil juventud;
muero obeso
y en un soplo regreso
o despierto a mis treinta años
transformado
en crítico despiadado
o tan solo
en un hombre con dignidad.

lunes, julio 30, 2018

Yira


haciendo cosas
en caída libre,

es como el tiempo sabe
llevar lo mío
hasta vos;

pareces hoy
un mediodía sin víctimas,

un sueño veloz

y por ahí te vas colibrí,

con los miedos habituales
de atesorar
una historia a medias;

es que

pocas veces terminan por hacer
todo el trabajo sucio con vos

los gobiernos
y los servicios;

mañana habrán

agujeros en la memoria que algunos
no van a extrañar.


martes, abril 17, 2018

Fuego para las maquinas


me acerco a una ocupación más sutil
más ligera
los ventanales empañados en ceniza
convidaran por siempre el seco gusto de
las maquinarias

sin pestañar los despido, sabiendo
que no serán los últimos bosques humanos
ni mis últimas colillas por machucar

que esperan camuflarnos bajo instituciones
excavadas del trabajo pesado
la trama del tiempo nos tiende una mano
fácil
de candado abierto a mis ojos sin cierre
encendidos
                  a tanto anticipo por lo que vendrá

pocas cosas
                nos unen
sin ensamblarnos al paisaje

pocas cosas

la velocidad con la que creció esta cáscara
nos sigue pareciendo hermosa

maquinaría
                       veloz
      humana
un tren de carga a toda prisa

                                                      a estrellarse

                                  -algún día-

en otro amanecer automático

seguimos erguidos como lo hacen las
lápidas
al borde de los bosques de herrumbre y
hormigón

todavía se oye un canto en los fríos ecos
del salto fabril del último siglo

son días de ocio para nuestras fibras ópticas

detrás de las tardes
cuando descienda el brillo
nos concentraremos fantasmales
al pecho
todos esos pormenores hechos mitos
multitudes
de esta ideología holográfica

desde este abismo  
la conciencia espía al mundo
nos queda sujetarnos a la caída
para no desplomarnos en ciudades

¿qué le espera al ser vivo
  en paisajes de cemento?

al fuego que nos trajo hasta acá
es al que hay que atizar

antes que su encanto
pierda

domingo, febrero 25, 2018

Contame cómo es la libertad

al piso con todo lo mío
contame
¿cómo es la libertad?
los días
no sé qué los hice
los tuve
como un gesto inútil
con mecánica amabilidad
los aguanté latiendo
frente al olvido

fuego

la cultura se produce
hasta con ignorancia
y ahora que hay un poco
en todos
pasarán los viejos métodos
las ruinas que acumulan en la memoria
donde deambulan encadenados
con el aliento tibio
que no sirve para calentar a fuego
los frescos pasillos
los corredores amplios
que conectan patricios despachos
con silenciosas cámaras
donde al mundo mueven
pequeñas manos que no se adornan
con aspereza y cansancio
estrechan lazos
en los cuellos ganados

entre tanto ruido humano
los sigo viendo a ustedes
ajustándose los cintos
que hoy los contienen
prométanse
que sus próximas reivindicaciones
serán las singulares

fuego

a la deriva
me quedé en un pequeño instante
dándole vida a otras cosas
lejos del hombre desesperado
en un filo de un antes nada y
un después nada

dale contame
¿cómo es la libertad?